Fuente: Interempresas.net
Innovación y adaptación son dos términos muy importantes para cualquier organización. La innovación juega un papel protagonista en todos los sectores económicos y productivos, mientras que saber adaptarse a las tendencias es clave para no quedarse atrás.
En este sentido, son muchas las empresas que ya están apostando por las energías renovables, principalmente por la energía solar fotovoltaica, como aliadas en su apuesta por mejorar la sostenibilidad de su actividad, ahorrar en la factura de la luz y aumentar su competitividad.
Instalar autoconsumo fotovoltaico o firmar un PPA On-Site, opciones cada vez más populares
Un contrato PPA (Power Purchase Agreement por sus siglas en inglés) es un contrato de suministro de energía eléctrica a largo plazo establecido entre un generador y un consumidor que permite obtener visibilidad a largo plazo en el precio de la electricidad, por lo que el consumidor se protege de las fluctuaciones del precio de la energía del mercado.
En el caso de un PPA On-Site, contrato en el cual la instalación de generación está ubicada en el mismo lugar que se realiza el suministro, la empresa puede cubrir un porcentaje de la electricidad que consume a través de la energía generada por medio de una instalación de autoconsumo fotovoltaico normalmente ubicada en su cubierta. De esta forma, sustituye parte de la electricidad importada de la red eléctrica, generando un importante ahorro económico en su factura de la luz. Esta modalidad permite la obtención de una energía limpia y barata, con un precio fijo y sin necesidad de inversión por parte del cliente, , ya que desde la comercializadora se hace cargo de la inversión inicial, así como del coste de mantenimiento y operación de la instalación. Además, tras la finalización del contrato, el cliente tiene la posibilidad de hacerse con la propiedad del activo.
Por otro lado, el cliente tiene la posibilidad de comprar una instalación de autoconsumo fotovoltaico “llave en mano”, solución en la que la empresa es propietaria del activo y acomete la inversión correspondiente. Normalmente la instalación se encuentra en la cubierta de la empresa, aunque también puede ser sobre un terreno anexo.
Las ventajas del autoconsumo fotovoltaico y de los PPA On-Site en el sector alimentario
El sector alimentario representa el 3% de PIB español, y el 16% del total de la industria, y es un gran consumidor de energía, recurso fundamental en los procesos de cultivo, procesamiento, empaquetamiento, conservación y distribución de los alimentos.
La tecnología fotovoltaica, que ya es la forma más barata de producir energía eléctrica en los países que cuentan con un buen recurso – como España -, permite no sólo mejorar la huella de carbono y el impacto ambiental de la actividad de las empresas, al aprovechar el recurso solar para generar energía limpia que no emite gases contaminantes, sino que además supone importantes ahorros en la factura de la luz, al reducir el consumo de electricidad procedente de la red. Todos estos beneficios se traducen en una importante mejora de su competitividad, elemento clave para cada actividad productiva, y especialmente relevante en un sector como el alimentario.